viernes, 13 de marzo de 2015

Pilcha para caminar bajo la lluvia ♥ (De como se crean los Pilotos Donovan)

Una buena forma de comenzar a escribir es leyendo.
Una muy buena forma de crear un Piloto, es sabiendo disfrutar de una jornada lluviosa. El tan temido y difamado "Día de lluvia".
Para empezar a escribir, elijo dos libros de la biblioteca:
Mario Benedetti "El mundo que respiro" y Roberto Arlt "Aguafuertes Porteñas". 
Al azar, los tomo de entre títulos como "Tener o Ser" de Erich Fromm, "Tierra" de Bárbara Marciniak, "Poemas de Batalla" de Francisco Urondo, "Niebla" de Miguel de Unamuno, entre tantos.
Mario me regala, para mi asombro y en la inmediata página 15, un poema llamado "Otra lluvia".
Nada es igual / Ahora la lluvia duerme en la sequía.
Y me dispara, gota a gota un chaparrón de realidades que me llevan a sentir que no hay día de lluvia igual al otro, que no somos siquiera los mismos bajo las mismas gotas y fundamentalmente que, hasta un mal nombrado "día gris", puede transformarse en una oportunidad soleada.
Imagino que la lluvia detiene o modifica el rumbo establecido. Altera el paso, acelera los momentos o te detiene con un diluvioso "¡Quedate ahí donde estás! ¡No sigas! ¡Aquí és, éste es el sitio!", con tal de no mojarte llegás a conocer, mediar palabra o compartir en un instante una vida entera, con aquel con quien, causalmente, compartís ahora el mismo refugio, porque la lluvia también lo sorprendió "ahí".
Entonces, esperan a que la lluvia pare o se deciden y corren bajo ella.
¿Cuantas personas nuevas podes llegar a conocer un día de lluvia no?


Es ahí cuando miro mi mesa de corte, observo los colores, los estampados y comienzo a imaginarme a todas las diferentes personas que coexisten bajo la lluvia. En el posible día de cada uno, en los hábitos modificados por las gotas. Elijo colores para el que se siente deprimido por un oscuro cielo, pero quiere cambiar el paradigma de la muchedumbre envuelta en pilotos negros y paraguas grises.


Y armo uno, diez, veintenas de pilotos todos diferentes para aquellos que llegan a ese mágico instante en el que se deciden y salen a caminar bajo la lluvia.
Recortes aún sin unir que van encontrando una personalidad definida, que no tienen un nombre todavía pero que tienen la forma perfecta que tienen las cosas que se hacen con el corazón.
Cortados uno a uno, se van arrimando y probando las partes antes de hermanarse. Pequeñas composiciones únicas sin nombre pero que en un futuro encajarán en talle e impronta con su futuro dueño, en un gratificante encuentro.


Lo último son los detalles, se colocan los broches, se une la capucha desmontable, se pasa el lazo, foto y ... ¡A provocar el encuentro!
Antes abro el libro de Roberto y leo:
Y lo único noble son los árboles... los árboles que envejecen apartándose de los hombres para recoger el cielo entre sus brazos.
Ese es nuestro deseo, que en el próximo día de lluvia, puedas cambiar el paradigma y recoger el cielo entre tus brazos.

miércoles, 11 de marzo de 2015

Reflotamos el blog ♥

De como creamos nuestras prendas, historias del campo y de la RUTA.-

- Para ir un poquito más allá de la marca
- Para explorar como se materializan las pilchas que te acompañan por tantos años.
- Para conocer historias personales del campo y de la RUTA.
- Para leer además de mirar.
Un viaje al concepto, al estilo de vida, a todo lo que nos lleva a crear lo que tanto te gusta y lo que tanto nos gusta hacer.

Los esperamos ♥